Sobre
este particular es interesante conocer cuál era la obligación de un Venerable
del siglo XVIII, según un Catecismo manuscrito utilizado en la Logia "San
Juan de los Amigos de la Virtud" de Thiers, en el año 1776. Dice así: "Juro
por el hierro[1] y
sobre la Santa Escritura, ante el Gran Arquitecto del Universo, y esta augusta
logia, vivir y morir en la religión católica Apostólica y romana en la que he
nacido; ser fiel a mi Rey, contra el cual jamás levantaré las armas; juro no entrar
en ninguna conspiración contra el Estado, así como jamás separarme de las leyes
de la Masonería en general, y de las Constituciones particulares de esta logia;
conducir y dirigir a mis hermanos con sabiduría, justicia y misericordia;
tratarlos con dulzura, defenderlos y socorrerlos en sus necesidades; llevarles
a obras de justicia y misericordia; aderirse a las cosas que sean propuestas y
unánimemente convenidas para el bien de la sociedad y de esta logia; no
conceder grados si no a los que verdaderamente lo merezcan, sin ninguna
distinción, ni excepción de persona; solamente constituir logia y hacer masones
con el consentimiento y asistencia de la logia; nosufrir directa ni
indirectamente ninguna cabala, ni disensión es en la logia; y seguir en toda
ocasión los caminos de mis padres, a fin degozar de la recompensa de los justos".[2]
En
no pocas logias cuando un profano pedía ser recibido franc masón, no solamente
se informaban si era de buena vida y costumbres, sino que además el Venerable
le preguntaba si era católico, apostólico y romano. Así en Toulouse, por ejemplo,
todavía en octubre de1793 el candidato prestaba juramento teniendo la mano
derecha sobre los Evangelios, y la mano izquierda con un compás abierto y las
puntas colocadas sobre el pecho izquierdo.[3]
En
Annonay, cuya población estaba compuesta a la vez de católicos y protestantes,
que por otra parte vivían en buena inteligencia, los candidatos de las dos
logias existentes en esa ciudad estaban obligados a declarar ante la logia
reunida, que pertenecían a la Religión católica, apostólica y romana; o si eran
protestantes, que pertenecían a la religión cristiana.[4]
No obstante en 1774, el Grande Oriente rechazó el afiliar a los comediantes,
que no tenían otra culpa que el haber sido excomulgados por la Iglesia. En esa
época la opinión pública, a pesar de todo estaba más a favor de los comediantes
que de la Iglesia.
Trece
años más tarde, en 1787, la logia Saint-Jean de Jérusalem de Nancy,
persistía en el proceder del Grande Oriente, y excluía todavía a los comediantes,
alegando, por otra parte, que eran "viles a los ojos mismos de los profanos".
Como nota curiosa cabe reseñarse igualmente que, por ejemplo, los mases "del
Artois, apoyaron a los magistrados en sus gestiones para que no expulsaran a los
Jesuítas en 1762 [5]
[1] Alusión al compás y demás instrumentos de la arquitectura que solían tener
en la mano izquierda durante el juramento.
[2] L ' Obligation
d'un Venerable de Loge au XVIII s., Annales Historiques
de la Révolution FranQaise, 5 ( 1 9 2 8 ) 70. Apéndice 36.
[3] GROS, J. ,
Les loges maconniques de Toulouse de 1740 a 1870, Rev . de la Rev . FranQaise,
40 ( 1 9 0 1 ) 2 4 0 - 2 4 1 ; 2 5 8 .
[4] ROSTAING,
L. , Les anciennes Loges d ' Annonay et les Clubs ( L y o n , 1 9 0 3) 30-35.
[5] MORNET, D.
, Les origines intellectuelles de la Révolution Frangaise, 1715-1787 (París,
1954) 3 6 7 .